Conexión REL
Hace dos meses, el cuerpo de un joven fue
encontrado tirado sobre el escritorio de su habitación con quemaduras de tercer
grado y mordeduras en el brazo derecho. Luego de la intervención policial el juez
caratulo la causa como "muerte dudosa". La víctima se llamaba José Ghinsburgisad,
25 años, castaño y tez blanca; fueron sus vecinos quienes denunciaron el hecho porqué hacía días que no lo veían y sentían un extraño olor que salía de la casa. Desde
aquel día a la fecha sucedió lo siguiente:
Un
grupo de tres detectives decidieron investigar el caso. Arturo James, hombre intelectual
que se encargaba del seguimiento de la investigación; Fernando Torres, hombre
serio, enojón y de pocas palabras; Alfonso Lebrón, vago y divertido. Los tres se
encargaban de interrogar a los implicados y buscar pistas.
Buscando
pruebas en la escena del crimen, hallaron sangre de la víctima en todas las
paredes y además habían muchos de los muebles estaban caídos. El cuerpo mostraba
que habían pasado varios días desde la muerte de José: estaba muy hinchado, deformado,
con un olor nauseabundo por lo cual era
difícil su reconocimiento. Según los vecinos la víctima vivía sola y no se le
conocían parientes.
El
barrio era un lugar tranquilo, con seguridad privada que rondaba en un auto
particular conducido por ex policías. No se habían escuchado hasta ese momento
noticias sobre asesinatos, ni robos por lo que el hecho ocurrido tenía
conmocionados a todos los vecinos.
La
hipótesis de James era que José tendría algún enemigo. En busca de pruebas para
confirmar esta hipótesis, dos de los detectives fueron a interrogar a los
vecinos, mientras Lebrón se ocupaba de investigar el celular de la víctima.
Torres y James fueron a visitaron a quien era lo más cercano a un familiar para
José, su mejor amigo Leonardo. Leonardo se notaba algo tenso pero aun así no se
negó al interrogatorio. Torres le pregunto y pudo sacar
la siguiente información:
-José
últimamente estaba más deprimido de lo normal.
-No
había tenido mucho contacto con él los días previos antes del incidente
-José
no era de hacer muchos amigos/enemigos
-Era
muy intelectual y muy capaz de todo.
-Solo
tenía tres amigos: El (Leonardo), Esteban y Ramiro.
Más tarde, al
investigar sobre estos dos últimos amigos, Torres y James se dieron cuenta de que
estos dos ya estaban muertos. Mientras tanto Lebrón investigando, su celular se
dio cuenta de que éste era propiedad del gobierno.Y se lo había dado como
herramienta para su trabajo, no solo eso, sino que José pertenecía a una
empresa del gobierno relacionada con actividades químico-experimental y al
escuchar esto, Torres y James se sorprendieron y empezaron a buscar información
sobre esta empresa. Inmediatamente se contactaron con el gobierno pero éste les
negó que existiera y los amenazo con que si seguían investigando comenzarían
a suceder cosas fuera de lo normal, invitando a los detectives a apartarse de
la investigación.
Cuando escucharon este mensaje, James y Lebrón dejaron el caso
pero Toero rres no se dio por vencido y siguió investigando sobre esto. Torres trato de buscar información de una manera u otra pfue inútil, todos los
accesos a la información estaban bloqueados. Entonces tuvo que empezar a
deducir los hechos a partir de la información que tenía.
De varias hipótesis se dio cuenta de algo: tal vez, al ser tan
intelectual Ramiro y Esteban no eran
amigos (ya que no había ni un mensaje de ellos en el último mes en el celular)
sino que a través de sus nombres, José trataba de pasar algún mensaje mediante
sus nombres. Torres intento de diversas formas y encontró una forma juntando
las iniciales de cada nombre, Ramiro, Esteban y Leonardo, REL (Religión En
Libertad), una especie de armada militar en el gobierno contratada para
establecer orden sobre el país. José sabía la fórmula para una especie de
bomba-gas, para poder controlar a las rebeliones que se iban a ejercer. En ese
momento, Torres se dio cuenta que a José no lo había matado nadie, que solo se había suicidado para el bien de la sociedad y que su propósito era que alguien se diera cuenta de lo que, en realidad, estaba pasando. Torres dejó esta información en un
sobre cerrado para el juez de la causa, y hasta el día de hoy nadie supo más de
él.